Pienso que con frecuencia juzgo a otros, y eso me lleva a separarme de los demás..Tengo que imaginarme la situación que vive el otro...para sentirme menos inclinado a juzgarle...Entonces en lugar de añadir más separación en el mundo estaré cultivando conexión y entendimento....Y decirles "Dios te bendiga"en vez de decir lo que estoy tentado a decir,...Eso me da serenidad...
Y de verdad le pido a Dios le dé a esa persona lo que deseo para mí... Después de todo Dios ama a esa persona tanto como a mí...
En lugar de juzgar a los demás por su comportamiento, intentaré examinar qué es lo que turba mi interior. Y pedirle a Dios que me sane y transforme por medio de su gracia amorosa.
Viene a mi memoria el juramento que realizan los practicantes de medicina de no hacer daño a nadie. Tengo que tranquilizarme un momento antes de juzgar y darle a Dios la oportunidad de que haga surgir algo nuevo para la persona que quiero juzgar y para mi mismo.
Un buen fin de semana...Seamos alegres...
Desde Angola...Andrés Randisi